Asesinato: La definición del derecho común de asesinato se refiere al homicidio ilegítimo de otro ser humano con premeditación y alevosía. Alevosía es el término técnico que a veces coloquialmente se conoce como premeditación, sin embargo, el término premeditación implica un plan preconcebido para cometer el asesinato; pero juntos estos dos términos su significado es más amplio.
Homicidio: A veces se utiliza como sinónimo de asesinato pero tiene un alcance más amplio. El asesinato es una forma de homicidio criminal.
Generalmente se utilizan las palabras asesinato y homicidio de manera intercambiable, pero no son lo mismo. Aunque el asesinato y el homicidio se utilizan tanto para describir el acto de matar a otro ser humano, las circunstancias que rodean los cargos son diferentes.
La forma más fácil de describir las diferencias entre el asesinato y el homicidio es que el homicidio es la muerte de otro ser humano, mientras que el asesinato requiere la intención de matar a otro ser humano. El homicidio puede ser usado para describir cualquier tipo de muerte donde otra persona tiene la culpa, pero hay circunstancias atenuantes que pueden influir en la acusación de homicidio. Cuando alguien es condenado por asesinato, no sólo son declarados culpables de un homicidio, sino también la mala intención de matar.
El homicidio no siempre es ilegal, mientras que el asesinato si lo es.
Cada estado en los Estados Unidos tiene diferentes tipos de clasificaciones de homicidio. Sin embargo, estas clasificaciones generalmente se dividen en tres categorías generales. Las categorías generales son:
Por lo general se refiere a un asesinato que no es intencional que viene por el resultado de una imprudencia, negligencia criminal o de un hecho ilícito, quiere decir, un delito de mayor o menor nivel (como DUI). La distinción habitual de este tipo de homicidio es que es un delito donde la muerte de la víctima no es deseada.
Los cargos de homicidio involuntario a menudo vienen a raíz de un accidente de coche mortal causada por un conductor bajo la influencia del alcohol u otras drogas. Aunque el conductor nunca tuvo la intención de matar a nadie, su negligencia en la operación de un vehículo en estado de ebriedad es suficiente para satisfacer los requisitos del cargo. Por ejemplo: una persona llega a su casa y encuentra a su pareja siéndole infiel, angustiado, se dirige al bar de un local para ahogar sus pena, después de unos cuantos tragos toma el coche y conduce por la calle al doble del límite de velocidad establecida, accidentalmente golpea a un peatón y lo mata.
También pueden resultar cargos de homicidio involuntario actividades que son totalmente legales, esto ocurre cuando se llevan a cabo de manera irresponsable o imprudente.
Los fiscales que intentan condenar a un acusado por cargos de homicidio involuntario necesitan probar que realmente existió una intención, ya que la maldad no es un elemento del delito. Un abogado criminalista intentará poner en duda al menos uno de los tres elementos del delito de homicidio involuntario para defender a su cliente de los cargos.
Algunas de las defensas legales más comunes a los cargos de homicidio involuntario:
Causar la muerte de otra persona a través de un comportamiento imprudente pero sin intención de matar, conlleva a una sentencia más ligera que la mayoría de las otras formas de homicidio. Un homicidio involuntario, tanto a nivel federal como estatal, se trata como un delito grave y por lo general lleva un tiempo en la cárcel de al menos 12 meses, más multas y libertad condicional.
Homicidio voluntario se define comúnmente como un asesinato intencional en el que el delincuente no tenía intención previa de matar; como, un homicidio que se produce por la pasión. Las circunstancias que llevaron a matar debe ser del tipo de que una persona razonable se vuelva emocional o mentalmente perturbado, de lo contrario, la muerte puede ser acusada como un asesinato de primer o de segundo grado. Por ejemplo: una persona llega a su casa y encuentra a su pareja siéndole infiel, en el calor del momento, toma un palo de golf de al lado de la cama y golpea al amante matándolo instantáneamente.
La defensa por cargos de homicidio voluntario es similar a la defensa que el acusado puede plantear por otros cargos de homicidio. El acusado que enfrenta una acusación de homicidio voluntario puede tratar de demostrar que en realidad no cometió el crimen, sus reclamaciones van a estar justificadas en que su comportamiento no cumple con los elementos de homicidio voluntario.
Algunas de las defensas legales más comunes a los cargos de homicidio voluntario:
Una vez que el jurado ha declarado culpable a un acusado de homicidio voluntario, el tribunal dictará la pena.
El castigo exacto depende de un número de factores. El factor más importante es el lenguaje actual de la ley que rige el castigo por homicidio en la jurisdicción. Los estatutos contendrán generalmente un solo castigo o una serie de castigos de los cuales los tribunales pueden elegir la hora de establecer una sanción para una condena.
Los jueces pueden considerar los factores agravantes y atenuantes a la hora de dictar sentencias. La ley federal contra el homicidio voluntario establece que los acusados deben recibir multas y/o penas de prisión de no más de diez años.
En la mayoría de los estados, el asesinato en primer grado se define como un homicidio ilegítimo intencional y premeditado, lo que significa que se produjo con posterior planificación o al acecho de la víctima. Por ejemplo: una persona llega a su casa y encuentra a su pareja siéndole infiel, tres días más tarde la persona traicionada va a esperar al amante de su pareja escondido detrás de un árbol frente a la casa del futuro asesino, el amante sale de la casa y él le dispara y lo mata.
La defensa contra los cargos de asesinato en primer grado se dividen en dos grandes categorías: las afirmaciones de que el acusado no cometió el asesinato en cuestión, y la admisión de que el acusado cometió el asesinato, pero no fue homicidio en primer grado.
El acusado que admite haber cometido el homicidio puede presentar una defensa donde justifica haberlo hecho en defensa propia, o de alguna manera presentar una incapacitación y así justificar el asesinato.
El demandado también puede argumentar que la fiscalía no ha probado todos los elementos de un primer cargo de asesinato premeditado y que en el crimen no hubo intención ni deliberación y premeditación.
Ejemplos de defensas legales más comunes a los cargos asesinato de primer grado son:
Por asesinato de primer grado se suelen dictar las sentencias más duras de cualquier delito. En la Florida todas las condenas por este delito están basadas en la pena de muerte y cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional.
Entre los factores agravantes que influyen para la sentencia de un asesinato de primer grado los más comunes son:
Se puede definir de dos maneras: como un asesinato intencional que no es premeditado ni planeado o como un homicidio causado por la conducta peligrosa y la falta de interés del delincuente por la vida humana. Este tipo de homicidio puede ser visto como el punto medio entre el asesinato de primer grado y el homicidio voluntario.
Existen tres situaciones típicas que pueden constituir asesinato en segundo grado:
Existen varias defensas que pueden aplicarse a un asesinato de segundo grado. La mayoría de los acusados afirman que en realidad no cometieron el delito. Otros acusados admiten haber matado a la víctima, pero reclaman algún tipo de justificación. Los abogados llaman a estos casos defensas afirmativas. Al igual que con la mayoría de los casos penales, el resultado de una estrategia de defensa dependerá de los hechos que rodean los cargos y las leyes de la jurisdicción.
Ejemplos de defensas legales más comunes a los cargos asesinato de segundo grado son:
Después de que un jurado ha encontrado un acusado culpable de asesinato en segundo grado, el caso pasa a la fase de sentencia. Durante esta fase, el acusado va a conocer qué sanciones del gobierno estatal o federal se impondrá por su crimen.
Hay varios factores que determinan qué pena recibirá una persona declarada culpable por estos cargos. En primer lugar, está el actual lenguaje de la ley que establece la pena, en segundo lugar, hay una serie de factores agravantes y atenuantes que los tribunales pueden tener en cuenta a la hora de decidir su sentencia. Todas estas cosas en conjunto determinarán qué castigo recibe un acusado.
Los estatutos que prohíben específicamente el asesinato en segundo grado, por lo general contienen una discusión de las sanciones correspondientes por el delito. Esto toma un período de tiempo, de 15 años hasta una cadena perpetua.
La Florida es uno de los estados se rige por un asesinato de tercer grado. Viene dado por cualquier homicidio cometido con intención maliciosa de causar un daño corporal, pero no necesariamente la muerte. Distinguir un asesinato de tercer grado de un homicidio voluntario puede ser complicado. Un ejemplo podría ser: una persona golpea a otro varias veces con una brutalidad significativa durante un altercado y la persona golpeada muere a consecuencia de una hemorragia cerebral o lesiones internas provocadas por los golpes; esto resulta un cargo de asesinato en tercer grado utilizando la gravedad de la crisis como una prueba de malicia. A diferencia de que, si una persona que golpea a otro en un ataque de rabia una sola vez y a consecuencia de esto la persona muere, sólo podrá ser acusado de homicidio voluntario.
Miami se ha convertido famoso en el país por el número de asesinatos que se producen, por eso, cualquier tipo de homicidio es considerado como un delito grave.
Si se enfrenta a cargos de homicidio en el área de Miami, Florida es posible que sea condenado a una pena de prisión de hasta 15 años. En algunos casos de homicidio el demandado es acusado de un delito grave de primer grado, existe la posibilidad de una pena de prisión de hasta 30 años
Independientemente de las circunstancias o el resultado de los cargos, el termino homicidio implica la toma de una vida humana, por eso se debe contactar con un abogado capacitado en estos temas de homicidio para guiarle a través del proceso legal.